Hay momentos en los que estás a punto de caer pero algo te sostiene, ese algo es tu fuerza interior.
Es la capacidad que todos tenemos para resistir a momentos difíciles.
Se define también como resiliencia, ser capaces de sobreponernos al dolor emocional y salir adelante logrando un equilibrio interior.
A veces las ramas de un árbol tienen que romperse y caerse, esto es absolutamente necesario para su proceso de evolución.
Las ramas viejas y enfermas se caen para dar paso a unas nuevas completamente sanas.
De igual forma sucede con nosotros, los seres humanos.
Rompernos y recuperarnos es un proceso natural.
Reconócelo, acéptalo, vívelo y comprende el mensaje, cuando lo hagas, tus ramas empezarán a florecer de nuevo.
Confía en el proceso. Sin temor. Recuerda que todo es perfecto.
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