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Un testimonio debe cumplir la regla de las ‘tres C‘: debe ser claro, concreto y creíble.
Agrega valor al acto de recogida de testimonios, haciendo sentir a tu cliente especial.
Ofrécele a tu cliente algo a cambio como un descuento inicial o un producto de muestra gratuito.
El mejor momento para solicitarle un testimonio a tus clientes es cuando recién compran y/o contratan, esto se debe a la emoción inicial que ellos sienten al saber que han seleccionado la mejor opción.
Recuerda que el testimonio debe ser un acto voluntario por parte del cliente.
Que tus clientes hablen bien de ti dice mucho de tu marca.
Explícale a tu cliente que solo pides testimonios de aquellos proyectos en los que te sientes realmente orgulloso(a) de haber trabajado y pregúntale cómo ha cambiado y/o mejorado su negocio luego de haber utilizado tu producto o servicio.
Recuerda que un testimonio bien estructurado aportará valor agregado.
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¡Cualquier duda estoy aquí para ayudarte!
¡Feliz viernes de #copywritingtips !
