Mostrar es enseñar algo y demostrar es decir que algo es cierto con hechos.
Poder validar con hechos que lo que decimos es cierto nos ayuda a vender más. También nos ayuda a ganarnos la confianza de otros.
Sin embargo, todo depende del contexto y de la estrategia que utilicemos.
Hay veces que es mejor no intentar demostrar nada y dejar que sean los clientes los que hablen de lo maravilloso que es nuestro producto o servicio.
Si todo el tiempo somos nosotros los que estamos demostrando lo bueno que somos, podríamos generar el efecto contrario en la audiencia (desconfianza).
Igual sucede en el amor, lo mejor es permitir que sea la otra persona quien descubra todo lo que somos y tenemos para dar, sacando nuestra mejor versión y dejando que los hechos hablen por sí solos.
Si el amor es verdadero nos demostrará que sí es posible ser un equipo que vuela en la misma dirección a pesar de tener sueños distintos.
¿Qué has pensado al ver esta foto?
Y ¿qué opinas acerca de este tema de demostrar algo con hechos y no tanto con palabras?