Quizás también te ha sucedido, sentir que la prisa es la protagonista del día, sentir que el tiempo no alcanza y que los días son una eterna competición.
Competimos para ver quién es el mejor, quién tiene mayor número de seguidores, quién vende más, quién es más reconocido y es necesario recordar que la vida no es un maratón.
Cada quién debe ir a su ritmo y decidir si desea ser participante o espectador.
La diferencia entre ser participante y espectador
En la vida a veces somos participantes o espectadores, todo dependerá de la situación.
Cuando eres participante te implicas, te motivas a hacerlo mejor cada día, en equipo, uniendo almas, uniendo esfuerzos.
Cuando eres espectador te detienes, tomas una pausa, para observar, para analizar, para reinventarte, para ver desde fuera con empatía y poder luego ser parte de nuevo como participante.
Ambos estados son importantes y sea de la manera que sea, hay que recordar que la vida es para vivirla sin prisas, si necesitas correr hazlo, siempre viene bien un poco de adrenalina, pero recordando siempre la palabra mágica: equilibrio.
Porque definitivamente la vida no es un maratón, es para disfrutarla y vivirla sin prisas.
Y hoy, ¿tú qué decides ser?, ¿participante o espectador?
Cuéntame, me encanta leerte.
Gracias por leerme, gracias por estar. ⭐⭐⭐⭐⭐
¡Feliz día querido(a) amigo(a) emprendedor(a)!
