El día a día de un(a) emprendedor(a) es a veces un camino fácil y otras un camino difícil, lleno de cuestas, escaleras largas y retos inesperados, pero, sobre todo, hay que saber que no es un camino para todo el mundo.
No todos estamos preparados para ser emprendedores, sin embargo, todos podemos llegar a serlo, capacitándonos, investigando y, sobre todo, deseándolo con el corazón, queriendo desarrollar nuestros talentos y nuestra pasión para nuestro propio beneficio y el de los demás.
Ser emprendedor es cuestión de decisión
Sí, ser emprendedor es cuestión de ser capaz de decidir el camino que ahora quiero seguir y para eso tengo que saber elegir sabiamente.
El camino del emprendedor te lleva a un destino soñado: tu libertad
Sé que quizás a veces te sientes sin rumbo y perdido siendo emprendedor porque son muchos los trámites y los requisitos, por ejemplo, darse de alta y trabajar como autónomo es similar a emprender un viaje del héroe, no sabes lo que encontrarás, pero aun así decides ser valiente y empezar.
En muchas ocasiones para enfrentar los retos (el camino difícil) queremos tomar la vía fácil (escaleras mecánicas) sin pensar mucho en las consecuencias, por ejemplo, trabajar sin facturar, tener una página web sin políticas de privacidad y todos los aspectos legales en regla, entre otras cosas que hacen que ese «camino fácil» se convierta luego en un camino mucho más difícil.
El camino fácil llegará cuando hayas conocido el camino lleno de cuestas, cuando puedas tener el control de tu negocio.
¿Te ha sucedido que al encontrarte con el camino difícil (escaleras largas) te regresas para ir por el camino fácil (escaleras mecánicas)?
No eres el(la) único(a). Cada día son más las personas que deciden emprender y trabajar a medias, optando por el camino fácil.
Es necesario tener claro que, por lo general, lo fácil no es lo mejor y tampoco lo difícil es lo peor, es cuestión de enfoque, discernimiento y tener poder de decisión.
El camino se hará más sencillo si decides buscar apoyo y asesoría de expertos
Por ejemplo, si el diseño no es tu especialidad, no intentes hacer los diseños de los anuncios tú mismo(a) porque quizás no sean diseños profesionales y podrías dejar de proyectar la imagen que deseas y por muy perfectos y atractivos que sean tus textos, si la parte visual que acompaña a las palabras falla, el mensaje no se transmitirá de una manera eficaz.
Seguramente hay tareas relacionadas a tu negocio que podrás hacer tú mismo(a), hoy en día existen muchos tutoriales y guías específicas en distintos ámbitos que te ofrecen instrucciones claras y precisas para que puedas realizar desde diseños de páginas web hasta tu propia estrategia de comunicación y copywriting, sin embargo, asegúrate de poder contar no solo con la información que una guía o tutorial te ofrezca, sino también con la asesoría de un profesional y experto en ese tema.
Aprovecho para recordarte que pensando en hacerte el camino un poco más fácil en tu día a día como emprendedor(a), he creado la guía DIY — Copywriting para emprendedores (plan de vuelo) para ayudarte a convertir seguidores en compradores con textos que puedas escribir tú mismo.
Espero que te guste y te sea útil esta guía y recuerda que aquí estoy para ayudarte a crear textos que conecten y enamoren a tus clientes, es mi mayor reto diario.
Sí, yo he elegido el camino de los retos, porque sencillamente es un camino que me encanta, que me brinda las mayores satisfacciones, porque aprendo más y sobre todo, porque puedo ayudar a otros a convertir ideas en palabras que vendan.
Y tú, ¿cuál camino decides seguir? ¿El fácil o el de los retos?
Feliz día querido(a) amigo(a) emprendedor(a)
¡Que el sol ilumine tu día hoy!
